Hoy soñé con ella,
con su cabello pelirrojo,
tan peligroso y hermoso como el planeta rojo.
Con sus ojos color café,
un café que ni en Starbucks lo puedes encontrar
pues solo Dios a ella se lo quiso dar.
Con sus pecas,
que asemejan una hermosa constelación
en su bronceado cutis por el dorado sol.
Todo fue perfecto,
lindo y hermoso.
Hasta que desperté,
y me di cuenta de que no estaba con ella
y que tal vez nunca lo estaré.
No se lo que hice mal,
y no se si algún día lo sabre.
Lo único que se,
es que por ella siento algo que nunca he sentido
que me gusta y me disgusta al mismo tiempo.
Y creo que ya se lo que es,
es algo que la gente adulta
lo llama "Amor."
En fin,
espero y algún día volverla a ver,
después de todo por eso me fui.
Para poder volver.